jueves, 8 de abril de 2010

Respirar es una peligrosa aventura


En nombre de la libertad de empresa, la libertad de circulación y la libertad de consumo, se ha hecho irrespirable el aire urbano. El automóvil no es el único culpable del cotidiano crimen del aire en el mundo, pero es el que más directamente acata a los habitantes de las ciudades.
Las feroces descargas de plomo que se meten en la sangre y agreden los nervios, el hígado y los huesos, tienen efectos devastadores sobre todo en el sur del mundo, donde no son obligatorios los catalizadores ni la gasolina sin plomo. Pero en las ciudades de todo el planeta el automóvil genera la mayor parte de los gases que intoxican el aire, enferman los bronquios y los ojos y son sospechosos de cancer.
En Santiago de Chile, según han denunciado los ecologistas, cada niño que nace aspira el equivalente de siete cigarrillos diarios, y uno de cada cuatro niños sufre alguna forma de bronquitis.
Úselo y Tírelo de Eduardo Galeano es uno de los libros que puede consultar en la Sala de Lectura del Foro santafesino, en el horario de 9:00 a 11:30 hs.

No hay comentarios:

Publicar un comentario